El Banco Mundial ha elevado su estimación de crecimiento económico para el Perú en el presente año, pasando de un 2.5 % a un 2.7 %, superando así las expectativas previas. Esta revisión al alza contrasta con la proyección de crecimiento para la región, establecida en un modesto 1.6 % para el año 2024.
Factores de riesgo, según el Banco Mundial
El vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Carlos Felipe Jaramillo, señaló que, «si bien el crecimiento económico es positivo, la inestabilidad política y la violencia en el país pueden desincentivar la inversión, lo que a su vez podría limitar el desarrollo económico y social del Perú».
A pesar de los desafíos mencionados, el Banco Mundial destaca el buen manejo de la inflación en la región, reflejo de décadas de reformas macroeconómicas sólidas implementadas en el Perú y otros países. La inflación regional, excluyendo a Argentina y Venezuela, se sitúa en un 3.5%, considerablemente por debajo del 5.7% registrado en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE ).
Para aprovechar este progreso y estimular el crecimiento económico, se enfatiza la necesidad de abordar desafíos estructurales persistentes en áreas como infraestructura, educación y comercio. Se sostiene que estas reformas son fundamentales para mejorar la productividad y la integración del Perú y la región al mercado global, lo que a su vez podría impulsar un crecimiento económico más sostenible y equitativo.