El exministro de Salud, Abel Salinas, en entrevista con El Tiempo, opinó sobre las estrategias que ha tenido el Estado durante la emergencia por el COVID; igualmente dio algunas recomendaciones para la ministra Pilar Mazzetti.
– ¿Las estrategias del Estado en esta emergencia han sido efectivas?
Creo que los resultados nos obligan a pensar que las estrategias no han sido efectivas, en todo caso, han fracasado y entiendo que eso ocurre porque algunas han sido muy a destiempo, tardías o aisladas.
– ¿Cómo cuales?
Por ejemplo, la cuarentena masiva que significaba confinar a todos los ciudadanos como estrategia única. Eso en ningún país del mundo dió resultado; sin embargo, aquí es lo que hicimos. Tampoco se sumó la detección con pruebas diagnósticas o moleculares, por alguna extraña razón se optó por las pruebas serológicas mal llamadas rápidas, que no nos permitieron detectar oportunamente el virus, se abandonó los establecimientos de primer nivel de atención en salud y nos dedicamos a preparar hospitales y camas de UCI que había que hacerlo, pero que al inicio de emergencia no era la prioridad. Otra medida que no dio resultado fue la forma en que entregaron los bonos porque ocasionó aglomeraciones en los bancos, ello debido a varios factores: el horario de atención de esas entidades bancarias así como la cantidad de personas beneficiadas por día.
– ¿Fue una correcta decisión que la ministra Pilar Mazzetti sea ratificada en la cartera de salud?
Sí, porque no podemos estar cambiando a cada rato a los ministros, más aún en pandemia y sobre todo cuando ha empezado bien, la ministra Mazzetti lo primero que ha hecho es buscar sincerar y transparentar las cifras porque eso nos permitirá tomar decisiones mucho más estratégicas lo que debe hacer ahora es corregir todos esos errores de las dos gestiones anteriores, en cuanto la pandemia.
– ¿Qué recomendaciones le daría a la ministra de salud Pilar Mazzetti?
Sincerar la cifras con prontitud, hacer pruebas diagnósticas o moleculares, activar y fortalecer el control comunitario y domiciliario con los gobiernos locales regionales y la propia comunidade, se tiene que retrotraer la desactivación del Centro de Epidemiología del Perú, esta institución se encarga de vigilar, prevenir y controlar las epidemias. Lamentablemente, la gestión anterior lo desactivó para fortalecer el Instituto Nacional de salud.Fue una mala decisión dejar de lado al Centro de Epidemiología que es clave para la lucha contra el COVID. Se tiene que fortalecer al epidemiólogo del campo, que es el que tantos resultados favorables nos ha dado al Perú, por ejemplo en el control del cólera, el H1N1 en el 2009; en el caso de Piura en el dengue y malaria.
– ¿Por qué cree que se desactivó el Centro de Epidemiología?
Me parece bien raro que en un tiempo de pandemia se trate de fortalecer el Instituto Nacional de Salud a través de la investigación que ya sabemos tiene intereses que pueden ser académicos pero muchas veces son personales y que no apuntan por el bienestar del país, en vez de segurar la vigilancia y control con la epidemiología. Es urgente reactivar el trabajo de los epidemiólogos de campo, y más aún en regiones como piura ica la libertad puno cusco Arequipa cuya población está siendo la más afectada.
– El presidente anunció un presupuesto de S/20 mil millones para el sector, ¿Es histórico es presupuesto?
Todos los años el presupuesto de salud ha crecido desde el 2009 entre 8% y 10%, desde S/5 mil hasta S/18.500 millones (presupuesto inicial de apertura del 2020), este incremento de 20 mil millones; es decir, 1.500 millones más, significa un aumento menor que de los años anteriores. Yo, la verdad, nunca entendí por qué era un presupuesto histórico, en todo caso todos los años es histórico porque siempre hay aumento.
¿Fue un mensaje populista?
Creo que nos estaban sorprendiendo, porque nunca explicaron porque llamaban al presupuesto de S/20 mil millones como histórico cuando no lo es.
– El presidente también anunció la unificación del SIS y EsSalud ¿Es viable esa medida?
El EsSalud vive de los aportes de los empleadores privados y públicos, no es un dinero del Estado; el SIS vive del dinero del Estado, no se puede juntar esos presupuestos así no más, y menos aún porque el marco constitucional que lo impide. No puede utilizarse el aporte de la seguridad social para otros fines, para hacerlo efectivo deberá hacerse una modificación constitucional. Pero sin llegar a ese extremo es impráctico en este momento, es inaplicable, el propio Ministerio de salud no puede con los hospitales que tiene en Lima, la seguridad social tiene serias dificultades a nivel nacional, los hospitales públicos en las regiones tienen varias deficiencias, acaso van a sumar ineficiencias.
–¿El país realmente contó con un plan de emergencia?
No, lo que hizo el país fue asignarle tres millones de soles al sector, de los cuales un millón era para repotenciar entre comillas 5 hospitales de Lima. Tuvimos decisiones desproporcionadas sin conocimiento de lo que significaba una pandemia, a esto le sumamos que no había un mensaje comunicacional adecuado, la gente no sabía cómo cuidarse.