La elección de la Mesa Directiva del nuevo Congreso ratifica la preocupación de los peruanos por la polarización política que seguirá encarnizada y sin tregua en el parlamento, con el ingrediente que –personajes conflictivos y autoritarios-, seguirán haciendo uso de las mismas táctica de las últimas elecciones: la lucha de clases, el abuso del liberalismo y la manipulación política del fujimorismo.
Guillermo Bermejo, el parlamentario de PL investigado por sus nexos con el terrorismo, fue quien lanzó ayer la primera piedra al twittear que el no permitir la participación de la tercera lista (oficialista) en la elección de dicha Mesa, es un acuerdo previo de las bancadas de derecha, pues según sus propios demonios, se estaría planificando una hipotética vacancia contra Pedro Castillo.
Lanzar tamañas afirmaciones en un ambiente de inquietud y tensión política como la que se vive en el país no hace sino exacerbar los miedos y polarizar aún más a los peruanos que esperan un mensaje conciliador y propuestas esperanzadoras que permitan calmar a los mercados financieros. Felizmente con el Congreso en manos de la oposición, el equilibrio de poderes es bueno.