Con esto de la pandemia, ciertos funcionarios camuflados en piel de cordero están haciendo su festín.
Así lo evidencia la investigación de Fiscalía a más de mil administrativos de gobiernos regionales y municipios involucrados en sobrevaloración de compras de equipos médicos y de protección, en perjuicio de quienes dan batalla al Covid-19 en la primera trinchera: el personal médico y pacientes.
Resulta absurdo, pero el sector salud, en estos tiempos de guerra contra una pandemia, no solo debe enfrentar los estragos que va dejando la virulencia del Covid-19 y las limitaciones de este patético sector, sino también a la jauría de lobos insaciables que están tras el presupuesto “sagrado” para hacer frente a la crisis sanitaria.
En Piura son varios casos en la mira de Fiscalía y de la Contraloría por compras fraccionadas; sobrevaloración de equipos; compra de mascarillas a precios escandalosos de hasta S/ 65 unidad; entre otros delitos. Ojalá que las investigaciones no se congelen por esas extrañas maniobras políticas y monetarias y se sancione a quienes traicionan la confianza, pone en riesgo al personal médico y están matando a los piuranos.