Es evidente las ganas que tienen algunos grupos políticas en el Congreso de negar la confianza al gabinete de Mirtha Vásquez; la ley de interpretación auténtica de la cuestión de confianza que hoy espera otro veredicto del TC, así lo confirma; pues esta norma es un intento por limarle las garras al Estado para que no pueda actuar en caso el legislativo niegue la confianza a dos gabinetes.

Al margen del “deseo destructivo” de ciertos parlamentarios de oposición, parece que la premier saldrá del Congreso, este jueves, con su “certificado de aprobación” porque al margen de los cuestionamientos, ha demostrado capacidad de diálogo, menos confrontación con la oposición, salvo las dos “ovejas negras” en los ministerios del Interior y Educación que, seguramente, serán interpelados por separado.

La cuestión de confianza, sin duda, todavía asusta a los parlamentarios, sin embargo, en aras de la gobernabilidad y la confianza que pueda dar la premier, es evidente que el Congreso le dará la confianza, pues no hace falta bombardear por allí al gobierno, porque el propio Pedro Castillo se encarga de sabotear su propia gestión.