«Que nos den el derecho a defendernos y que dejen que nuestros familiares nos den medicina», clama desde una celda un reo mientras padece los síntomas de coronavirus. Familiares anuncian denuncia contra el director del penal de Piura ExRío Seco.
La situación en el penal de Piura es preocupante tras la propagación de contagios por coronavirus. Así lo reveló un interno a través de un dramático testimonio que dio a El Tiempo.
Según nuestra fuente, el escenario es alarmante por los reos infectados, quienes padecen en sus celdas al no ser atendidos por el personal médico.
A esto se suma los cadáveres por COVID-19 que no estarían siendo recogidos y permanecen regados en el área de Tópico por más de 10 horas.
Un reo del pabellón cuatro contó a nuestra redacción que solo hay un doctor y dos enfermeras para atender las necesidades de emergencia a más de 4 mil internos.
Según relata, todos los sospechosos por síntomas del COVID-19 estarían siendo llevados a un auditorio para evitar la propagación del letal virus.
Los reos piden a las autoridades que no los dejen morir y permitan que sus familiares les lleven medicina, ya que no tienen ni una sola pastilla para tomar.
«Que nos den el derecho a defendernos, no pedimos libertad, queremos que dejen entrar medicina para poder curarnos», clama desde una celda un reo.
Dos muertes
El hacinamiento le está jugando una mala pasada a los más de 4 mil internos. Por este motivo el día de hoy se reportaron dos fallecimientos por posible coronavirus. Uno de ellos del pabellón F conocido como Cuadro Lizama.
Uno de los encargados del pabellón B recalcó que hasta el momento no se les ha practicado ni una sola prueba para descartar el coronavirus.
«En cada celda dormimos entre 20 a 30 personas, nos falta el oxígeno, presentamos síntomas y nadie nos ayuda. Nosotros somos seres humanos».
Denunciarán al director del penal
A este pedido de ayuda se sumó también una denuncia contra el director del penal Piura, Genaro Escamilo Gómez, por los presuntos delitos de homicidio culposo y omisión de funciones.
Según Fiorella Morocho, su padre quién cumplía prisión preventiva por el delito de peculado doloso murió a causa del coronavirus y no fue atendido a tiempo.
Narró que su padre presentó síntomas moderados desde el día jueves y pidió ayuda al doctor del penal. Sin embargo, no habría recibido medicina y su caso tampoco fue comunicado al personal del hospital Santa Rosa.
Por este motivo falleció a las cinco de la mañana del viernes y sus restos fueron retirados a las 8:30 p.m. del mismo día.
«A mi padre le faltaba poco para salir de la cárcel y no recibió atención médica. Hemos denunciado a los que resulten responsables. Lo dejaron morir y estuvo 19 horas ahí tirado. Nadie nos dijo nada», dijo Fiorella.
El Tiempo intentó comunicarse con el director del centro penitenciario, pero no se obtuvo respuesta.