Desde que inició la pandemia por el nuevo coronavirus, varios especialistas salieron al frente para brindar ciertas recomendaciones con el objetivo que las personas no terminen infectándose. Sin embargo, la población hizo caso omiso a las indicaciones de los expertos y/o autoridades como si la enfermedad fuera un juego.
Y, tras varios meses de emergencia sanitaria, las recomendaciones de las entidades encargadas de velar por la salud han manifestado nuevas formas de contagio luego de haber realizado nuevos estudios médicos con pacientes que tienen el SARS-CoV-2.
Para Mauricio León Rivera, director médico del Centro Detector del Cáncer y cirujano oncólogo de la Clínica Ricardo Palma, las personas que consumen frecuentemente tabaco se vuelven más vulnerables frente a la COVID-19 y otros males respiratorios.
El experto afirmó que el humo de tabaco disminuye las defensas y va dañando el pulmón lentamente hasta tener casi dos veces más posibilidades de progresión grave del virus, además de poder desarrollar diferentes tipos de cáncer.
«Fumar se considera hoy en día como factor de riesgo para cualquier infección del tracto respiratorio inferior y el nuevo coronavirus afecta principalmente a ese nivel, provocando que el daño respiratorio pueda pasar de leve a severo y con ello a la muerte», detalló León Rivera.
Atención, personas no fumadoras
El oncólogo también advirtió que el humo de tabaco es «muy peligroso» para los no fumadores debido a que una persona contagiada de COVID-19 sin diagnóstico al momento de expulsar su humo trasmitiría el virus a las personas que lo rodean, considerando al humo como «un factor de difusión del virus».
Asimismo, el especialista recomendó guardar una distancia mínima de hasta 10 metros frente a una persona que fuma cigarrillos como forma de prevenir un posible contagio.
Vía Wapa