Madrugada de terror. Dos policías fueron asesinados este martes 1 de noviembre en el Suburbio de Guayaquil. Los efectivos fueron víctimas de una serie de ataques violentos, incluso usando explosivos, contra la Policía Nacional, tanto en Guayaquil como en Esmeraldas.
Según las primeras indagaciones, varios sujetos atacaron a tiros un patrullero que circulaba por las calles 17 y Cuenca. A bordo iban los dos uniformados, quienes recibieron varios balazos.
El cuerpo de uno de ellos quedó dentro del vehículo, mientras que el otro cadáver quedó sobre la calzada. Hasta el sector acudió personal especializado, así como de la Fiscalía General del Estado (FGE), para realizar las investigaciones de este fatal ataque.
Los agentes acordonaron el área para hacer el levantamiento de los cuerpos. El doble asesinato ocurrió alrededor de las 02:30, a una cuadra y media de una Unidad de Policia Comunitaria (UPC).
Coches bomba
En la provincia de Esmeraldas, moradores captaron con sus celulares el momento en que un carro estalló al pie de una gasolinera ubicada en la vía que conduce al Puerto Pesquero Artesanal de Esmeraldas.
El vehículo quedó envuelto completamente en llamas, lo que generó preocupación ante el temor que se puedan contaminar los depósitos de combustible.
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Casi a la par, hubo la explosión de otro carro en los exteriores de una clínica del Seguro Social. Mientras que, en Guayaquil también se reportaron varios ataques con explosivos, casi de manera simultánea, en distintos puntos del norte y noroeste de la urbe.
En la Alborada se dio la primera alerta. Allí, una detonación alarmó a los uniformados que trabajan en una UPC ubicada en la avenida Rodolfo Baquerizo Nazur.
Sujetos habrían colocado un artefacto explosivo en un vehículo particular estacionado al pie del destacamento. En este caso, el estallido no provocó mayor daño, incluso el carro quedó aparentemente intacto.
A los pocos minutos se registró otra alerta, pero en una gasolinera de la vía Perimetral, muy cerca de «La Entrada de la 8», en el noroeste. Allí delincuentes en moto lanzaron un explosivo.
La detonación provocó afectaciones en un surtidor de combustible y en un aparador con mercancía. Por otra parte, en la Terminal Terrestre de Pascuales, explotó un auto estacionado en el parqueadero de buses urbanos.
Asimismo, las autoridades investigan otros atentados reportados también en Socio Vivienda, Orquídeas y Pascuales.
Ataques por traslado de reos
A la par que se producían los ataques, motorizados dejaron panfletos amenazantes a las afueras de dos medios de comunicación en el Puerto Principal.
Las amenazas apuntan a que la ola de terror de la mañana de este 1 de noviembre está relacionada con un supuesto traslado de reos desde la Penitenciaría del Litoral hacia otros centros carcelarios del Ecuador. Aunque la Policía Nacional aún no ha confirmado de forma oficial la veracidad de esa hipótesis.
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Los rumores sobre un presunto traslado de internos de los pabellones 8 y 9 de la Penitenciaría, que las bandas rechazan, llevaron a decenas de familiares a las afueras de la cárcel del norte de Guayaquil. Desde la 01:00 de este martes 1 se concentraron a las afueras del penal en el kilómetro 17 de la vía a Daule.
Temían por una alerta de posibles revueltas y enfrentamientos entre reos. Allí exigían información a las autoridades, mientras piquetes de policías ingresaban a la cárcel. En las siguientes horas se desataron ataques terroristas y atentados contra policías en el norte y sur de la ciudad.
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