El presidente Joe Biden ha decidido implementar un cierre temporal de la frontera entre Estados Unidos y México para aquellos migrantes que buscan asilo en su país. Esta medida será activada cada vez que se supere un cierto número de inmigrantes ilegales, según informó la Casa Blanca el martes.
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El anuncio fue realizado por el portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, quien describió estas acciones como históricas en un mensaje presidencial. Según lo señalado, estas restricciones entrarán en vigencia de manera inmediata, siendo activadas cuando los cruces de migrantes ilegales superen los 2.500 por día, una cifra que ya se ha superado.
¿Desde cuándo regirá esta medida de Joe Biden?
La orden ejecutiva, que comienza a regir este mismo martes, tiene un impacto inmediato. A partir de ahora, las autoridades migratorias tienen la facultad de deportar a aquellos que no cumplan con los estrictos criterios de asilo establecidos. Esta nueva política establece un límite máximo de 2,500 detenciones diarias en cruces no oficiales, en un promedio semanal, cifra por debajo del actual promedio. En abril, se registraron un promedio de 4,200 arrestos diarios.
Las autoridades han dejado en claro que para revertir esta medida, el número de cruces ilegales en la frontera debe disminuir a menos de 1,500 diarios. Sin embargo, esto parece ser un desafío, ya que la última vez que se alcanzó esa cifra fue en julio de 2020, durante la pandemia.
¿Qué es lo que deben hacer para ingresar a EE.UU. por asilo?
Según se ha informado, los migrantes que deseen solicitar asilo deberán demostrar ante las autoridades que existe una «posibilidad razonable» de que enfrenten tortura o persecución si son devueltos a su país de origen. Estados Unidos se adhiere a las obligaciones establecidas por la convención de las Naciones Unidas, la cual prohíbe la expulsión de alguien a un país donde pueda ser torturado.