Al menos ocho personas murieron y más de 20 resultaron heridas este martes en un ataque suicida con explosivos seguido de un tiroteo en un hospital militar de Kabul, mientras continúan los enfrentamientos en el interior del centro sanitario.
«Más de ocho personas han muerto y más de 20 resultaron heridas en las explosiones y ataque de hoy», dijo a Efe un miembro de los talibanes que pidió el anonimato, y agregó que las cifras podrían aumentar en las próximas horas.
Según afirmó a Efe el portavoz del Ministerio de Interior Qari Sayed Khosty, se produjo una explosión inicial frente a la entrada del hospital militar Sardar Mohammad Daoud Khan, situado en el centro de la capital afgana y con capacidad para unas 400 camas.
Un testigo que se encuentra dentro de las instalaciones del centro de salud, y que pidió el anonimato, aseguró a Efe que «hay atacantes dentro del hospital» y que «los disparos y los enfrentamientos continúan»
«El olor a explosivos se extiende por todo el hospital. Al menos dos explosiones más ocurrieron dentro del hospital en la cuarta y quinta planta del hospital», apuntó la fuente, y añadió que, además, en el momento del ataque, había entre 300 y 400 personas en el pinterior de estas instalaciones médicas.
No cesa la violencia
«Los talibanes han llegado al hospital, pero no son lo suficientemente profesionales para hacer frente al ataque», aseguró.
Un médico del hospital, Azhar Khalid Akrami, confirmó desde su cuenta de Facebook que los atacantes se encuentran dentro de las instalaciones del centro de salud tras haberse producido «una explosión y un ataque» en las cercanías.
Hasta el momento, ningún grupo se ha atribuido la autoría de este ataque.
El hospital Sardar Mohammad Daoud Khan es el principal centro hospitalario militar de Kabul, y se encuentra a tan solo unos pocos metros de la embajada de Estados Unidos y del Ministerio de Salud afgano.
Este centro sufrió en marzo de 2017 un ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) que causó más de una treintena de muertos y decenas de heridos, después de que un atacante suicida se inmoló en la entrada del hospital.
A continuación, el suicida abrió paso a otros tres insurgentes que irrumpieron en el recinto y dispararon «indiscriminadamente» hasta que el último de ellos fue abatido por las tropas afganas seis horas y media después del inicio del ataque.
El EI ha reivindicado ataques en al menos ocho de las 34 provincias afganas desde que los talibanes se hicieron con el poder el pasado 15 de agosto.