La farmacéutica Pfizer anunció que comenzará a probar su vacuna contra el COVID-19 en menores a partir de los 12 años, en pruebas que tendrán como objetivo comprender si el producto es seguro y eficaz para los adolescentes.
El mes pasado, Pfizer dijo que ampliaría sus pruebas para incluir a adolescentes de 16 años o más. Ahora, la compañía dijo que recibió la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para inscribir a niños de 12 años o más.
El Centro de Investigación de Vacunas del Hospital de Niños de Cincinnati, donde se llevarán adelante las pruebas, agregó que los adolescentes de 16 y 17 años recibirán la vacuna esta semana, mientras los adolescentes de entre 12 y 15 años se inscribirán en la prueba más adelante.
Cabe resaltar que es la primera vez que los menores de 16 años son incluidos en un ensayo de la vacuna para el coronavirus en los Estados Unidos.
La expansión en los grupos de edad se produce un mes después de que la compañía inscribiera a aproximadamente 44.000 participantes en la tercera y última fase del ensayo, según Pfizer.
No deben ser excluídos
Pese a que en la gran mayoría de los casos los niños desarrollan una enfermedad leve de COVID-19 o son asintomáticos, las investigaciones apuntan a que pueden infectar a otras personas.
“Creo que una de las cosas que es importante recordar es que aunque la tasa de mortalidad de los niños con COVID es más baja que en los adultos mayores, no es cero”, dijo a CNN Robert Frenck, director del Centro de Investigación de Vacunas del hospital de Niños de Cincinnati.
El especialista señaló el coronavirus “no es una infección inexistente en los niños”, ya que pueden desarrollar enfermedades graves y también morir de coronavirus y no hay forma de predecir cuáles lo harán.
También pueden contagiar a otras personas más vulnerables, incluidos sus padres, abuelos, trabajadores de la salud y otros. Además, los niños pueden desarrollar un efecto secundario poco común pero grave de la infección por coronavirus llamado síndrome inflamatorio multisistémico en niños o MIS-C.
“Realmente creemos que una vacuna para adolescentes y niños será fundamental para mantener al COVID-19 bajo control”, dijo Frenck.
De acuerdo a la presidenta de la Academia Estadounidense de Pediatras (AAP), Sara Goza, más de medio millón de niños se han infectado con COVID-19 este año en Estados Unidos. “Más de dos tercios de los niños que murieron eran niños negros y latinos”, indicó.
Como los menores fueron una de las categorías cuyas vidas fueron más afectadas por las restricciones dictadas por la pandemia, la especialista consideró además que no sería ético que “no tengan la oportunidad de beneficiarse de una vacuna, o retrasar ese beneficio por un período prolongado de tiempo”.
Datos
* Pfizer es, junto a Moderna, la firma más avanzada en los ensayos de vacunas. Ambas comenzaron sus etapas finales sobre fines de julio y requieren una segunda dosis a los 28 días.
* “Sin ensayos clínicos realizados en niños, la única forma de extender el uso de la vacuna COVID-19 a los niños sería confiar en los datos de los adultos, lo cual no es ideal”, indica L.J. Tan, director de estrategia de la Immunization Action Coalition, quien asegura que es realmente importante incluir a los niños.