Desde el lunes en que se autorizó el reinicio de algunas actividades, la ciudad sufre de una peligrosa concentración de personas en las calles, lo cual provocará un repunte de casos en las próximas dos semanas. Con hospitales al borde del colapso por falta de oxígeno y medicinas, el panorama es incierto.
“En Piura no podemos hablar de meseta y en la calle parece un día normal. En siete días veremos brotes y en unos siete días más, empezarán los casos severos. Habrá un repunte de los mismos”, expresó el médico y especialista en epidemiología, Edward Mezones-Holguín.
Agrega que algunos especialistas reiteran que no estamos en meseta, como dice el Ejecutivo, sino en el lado izquierdo de la curva, vale decir, en ascenso. “A la población le quieren decir [que estamos en meseta] para que se tranquilice, pero ese mensaje hace que la gente se sienta que está segura. En realidad, estamos en un franco crecimiento. Lo que cambia es la pendiente”, refiere el especialista.
Sobre las dos semanas, es el tiempo promedio que demora en la aparición de los primeros síntomas. El médico indica que ahora el virus lo puede llevar cualquier persona y al existir una salida masiva, hay riesgo de exposición. “Ahora se están exponiendo. La gente usa mal la mascarilla, se la quita. En la cola de los bancos ni siquiera están a un metro y medio. Están conversando y haciendo vida social”, dijo.
Hospitales
De otro lado, el especialista sostuvo que con el nuevo repunte de casos, la respuesta hospitalaria será menor. “No sé si perderá el control, pero sí será un reto mayor para el sistema de salud. Si el sistema no está respondiendo, cuando venga una creciente mayor de la pendiente, no habrá una respuesta en la misma velocidad”, acotó.
A su turno la epidemióloga Claudia Quezada también alertó del riesgo: “Si no se toman las medidas de uso de mascarillas y los protocolos para evitar transmisión, es probable que se incrementen los casos”, manifestó.
Mucha gente
A su turno, el jefe de Fiscalización de la comuna de Piura Juan Carlos Álamo consideró que existe un exceso de personas en las calles que no se relacionan con actividades autorizadas.
“Si bien es cierto se han dado algunas disposiciones, pero se ha notado un exceso de ciudadanos que no tienen claro el tema. Esto no es una luz verde para salir”, explicó Álamo.
Agregó que otro factor preocupante es la masiva salida de vehículos particulares con varios ocupantes. “El traslado por tema laboral solo es para una persona, pero lamentablemente encontramos vehículos particulares llenos. La gente no tiene claro la nueva convivencia. No vamos a regresar a la normalidad a lo que era antes del 15 de marzo”, señaló el funcionario.
Ambulantes
De otro lado, en el recorrido también se observó presencia de ambulantes en las calles junto a las farmacias y otros negocios de alimentos formales del centro. Algo similar se observó frente a las oficinas de transporte interprovincial de la Av. Sánchez Cerro. Aquí los vendedores de ropa y accesorios de celulares se han apoderado de un tramo de la vereda.
Al respecto el jefe de Fiscalización sostuvo que intervendrán con el vehículo hidrante lanza agua. “No queremos que pase lo que está pasando en La Victoria que se ha desbordado el comercio informal. El tema del ambulante ya no es solo de la informalidad sino es un tema de salud pública. Vamos a proceder y ser drásticos y ya estamos usando el vehículo hidrante de manera permanente. No queremos que después digan que hay abuso de autoridad”, señaló.
Cifras nacionales
De otro lado, el último reporte del Ministerio de Salud dio a conocer que la cifra de infectados por el COVID-19 aumentó a 123 mil 979 en el país. De este grupo, unos 8 mil 097 personas están hospitalizadas, de las cuales 909 requiere ventilación mecánica de una UCI.
Según el último reporte de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la transmisión del virus en el país aún se está acelerando y recomendó no bajar la guardia en la contención. Esto incluye a países como Chile y Brasil. En una sesión informativa de la OPS, se advirtió que América Latina superó a Europa y Estados Unidos en el número diario de infecciones, convirtiéndose en el epicentro de la pandemia del nuevo coronavirus.
Temerarios y de poca comprensión
El exdecano del Colegio de Psicólogos de Piura, Marco Magan Malafaya, consideró que la violación de la cuarentena demuestra una actitud temeraria y de poca comprensión de lo que está pasando. “Hay una conducta temeraria porque no se entiende el hecho de estamos en una pandemia y esto supone que el virus se va a quedar entre nosotros y vamos a tener que convivir con este. Mucha gente no lo entiende, se arriesga y expone su vida al salir a la calle”, opinó el especialista al respecto.
Agrega que se asocia el reinicio de actividades de ciertos sectores, con la disminución del riesgo. “Mucha gente entiende que está terminando el riesgo y que no se van a contagiar, cuando es lo contrario”, afirmó.
En esa línea, agregó, se debe mejorar los mensajes desde el Ejecutivo. “Las personas mejor instruidas, optarán por la cuarentena y el cuidado dentro de casa. Algunos entienden la cuarentena al revés, que es para los enfermos, pero no para los sanos”, comentó el psicólogo.
Por Frank García Guerrero