El presidente de Rusia, Vladímir Putin, optó por reemplazar a uno de sus colaboradores más cercanos, el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, con un economista de confianza, Andréi Beloúsov.
LEE TAMBIÉN ► Rusia incluye al presidente de Ucrania en su lista de búsquedas y capturas
«Hoy en día, en el campo de batalla, gana aquel que esté más abierto a la innovación, más dispuesto a implementar novedades lo más rápidamente posible», explicó Dmitri Peskov, portavoz de Putin.
Al mismo tiempo, el Kremlin anunció la destitución de Shoigú y su nombramiento como nuevo secretario del Consejo de Seguridad ruso, en sustitución de Nikolái Pátrushev, una figura de gran influencia en el país cuyo destino la Presidencia prometió revelar en «los próximos días».
Innovación en la estrategia bélica
Peskov señaló que los gastos en defensa de Rusia están aumentando, lo que requiere una revisión del funcionamiento del Ministerio de Defensa.
«Es crucial integrar la economía de la defensa en la economía nacional de manera que se ajuste a la dinámica actual», subrayó.
Destacó que Beloúsov, quien anteriormente lideró con éxito el Ministerio de Desarrollo Económico de Rusia y ha sido asesor presidencial en asuntos económicos durante mucho tiempo, ahora encabezará el Ministerio de Defensa como civil.
Beloúsov, de 65 años, ha estado bajo sanciones internacionales debido a su participación en la guerra en Ucrania desde junio de 2022.
LEE TAMBIÉN ► Un ataque de Rusia con misiles deja cinco muertos y al «castillo de Harry Potter»
¿Quién será el próximo en liderar la defensa de Rusia?
Después de casi una década en el cargo, Serguéi Shoigú, de 68 años, está dejando su posición como ministro de Defensa, un puesto que ocupó desde noviembre de 2012, poco después de que Putin regresara al Kremlin.
Su reemplazo llega tras 27 meses de conflicto y numerosas críticas tanto de halcones como de expertos por la aparente falta de éxito del ejército ruso en el campo de batalla.
Uno de los críticos más destacados fue el fallecido fundador de Wagner, Yevgueni Prigozhin, quien el año pasado pidió repetidamente la destitución de Shoigú, acusándolo de negligencia.
La salida de Shoigú se produce poco después de la detención de uno de sus subordinados, Timur Ivanov, por acusaciones de corrupción a gran escala.
Con el futuro de Ivanov aún incierto, su detención, vista por muchos como la mano derecha de Shoigú, sugiere un cambio inminente en uno de los ministerios más opacos de Rusia.
En su nuevo papel, Shoigú supervisará el Servicio Federal de Cooperación Técnico-Militar de Rusia, que ya no estará bajo el control directo del Ministerio de Defensa después de recientes cambios.