Pese a los operativos que se realizan en la ciudad, decenas de ciudadanos venezolanos continúan apoderándose de las vías públicas de Piura. Uno de las avenidas ocupadas por los migrantes es la Richard Cushing, ubicada detrás del colegio San Miguel.
Al respecto, el alcalde de Piura, Juan Díaz, indicó que viene coordinando otro operativo con la Policía y Migraciones para determinar su situación legal y desalojarlos de los espacios públicos. Añadió que, pese a este tipo de acciones, el problema continúa puesto que a diario cientos de venezolanos ingresan al país por la frontera con Ecuador.
«Esta situación no se podrá controlar mientras nuestra frontera siga siendo una coladera sin presencia de las autoridades. De acuerdo a las cifras de Migraciones, por día 12 mil venezolanos ingresan al país y muchos de ellos se quedan en Piura», señaló.
La autoridad manifestó que en reiteradas oportunidades les han brindado la ayuda como pasajes para que continúen su viaje al interior del país, sin embargo, los extranjeros solicitan terrenos para contruir sus viviendas y habitar en la ciudad.
Juan Díaz cuestionó al Ejecutivo al no poner «mano dura» a la migración de ciudadanos venezolanos y permite la intervención de ONG en la política migratoria del país.
Además, solicitó al gobernador Servando García, una reunión con los integrantes de la plataforma del Comité Regional de Seguridad Ciudadana (CORESEC), para tratar la problemática sobre la presencia de migrantes extranjeros que están invadiendo los espacios públicos de la ciudad.
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