Existen diversas historias sobre el origen de la malarrabia, pero la más popular es la que cuenta la historia de una mujer humilde que, con pocos recursos, preparó un plato simple para su familia con plátano maduro, queso fresco, cebolla y aceite. Su marido, al probarlo, le preguntó qué era, a lo que ella respondió con fastidio: «¡Malarrabia es lo que has comido!«. El nombre se quedó y el plato se popularizó entre las familias piuranas como una opción económica y nutritiva para la época de Cuaresma.

Ingredientes:

• 6 plátanos bellacos maduros
• 100 g de queso fresco
• 1 cebolla grande
• 2 tomates
• 3 ajíes amarillos
• 1 cucharada de achiote
• Aceite vegetal
• Sal y pimienta al gusto

Preparación:

• Sancochar los plátanos: Pelar los plátanos y cortarlos en trozos grandes. Colocarlos en una olla con agua suficiente para cubrirlos y llevar a ebullición. Dejar cocinar a fuego medio durante 30 minutos o hasta que estén blandos.
• Preparar el sofrito: Mientras se cocinan los plátanos, picar la cebolla, el tomate y el ají amarillo en dados pequeños. Calentar el aceite vegetal en una sartén a fuego medio y sofreír la cebolla durante 5 minutos. Añadir el tomate y el ají amarillo, y continuar sofriendo durante 10 minutos más, hasta que estén blandos.
• Agregar el achiote: Disolver el achiote en un poco de agua caliente y añadirlo al sofrito. Mezclar bien para que se integre con el resto de los ingredientes.
• Mezclar con los plátanos: Escurrir los plátanos y machacarlos con un tenedor hasta obtener un puré. Añadir el puré de plátanos al sofrito y mezclar bien hasta que se integren todos los ingredientes. Salpimentar al gusto.
• Agregar el queso: Desmenuzar el queso fresco y añadirlo a la mezcla. Integrar bien el queso con el resto de los ingredientes.
• Cocinar y servir: Cocinar la malarrabia a fuego bajo durante 5 minutos más, removiendo constantemente para evitar que se pegue. Servir caliente con arroz blanco, menestra y pescado seco.