En los más de 400 hoteles del litoral entre Piura y Tumbes, la ocupación no supera valla del 15%. A Talara solo llegó el 30% de los 20 mil turistas que esperaban para la temporada de verano.

Ante el nuevo golpe al sector turismo con el cierre de playas hasta el 31 de enero, la Cámara de Comercio de Piura propuso un rescate financiero a los negocios afectados en el rubro.

Según el presidente de Camco, Javier Bereche, varios hoteles y restaurantes de los balnearios están cerrados o quebrados.

“Estos negocios están quebrados porque no pueden pagar las deudas que tienen y contaban con esta temporada para salir adelante. El gobierno debe sacar un paquete de medidas para el reflote y rescate del sector donde no solo se brinde un FAE turismo, sino que los exonere de impuestos, IGV, pagos a entidades como Apdayc y se aplique la suspensión perfecta a los trabajadores, caso contrario, el desempleo será el más alto que ninguna otra temporada de Piura”, indicó Bereche

Otro tipo de ayuda serían, agregó, las normas para reprogramar las deudas con la banca comercial.

Refirió que varios de estos negocios de playa no tuvieron Reactiva ni la suspensión perfecta de labores durante el 2020.

Devoluciones

Tras la crisis, los empresarios del sector pensaban recuperarse con la temporada de verano dado que en navidad se llegó al 80% de ocupación de hoteles.
Sin embargo, todo cambió con la restricción de ingreso a la playa.

“Los 400 hoteles que operan en esta franja entre Piura y Tumbes están atendiendo a una capacidad del 15%. Hay hoteles y restaurantes completamente paralizados. Hablamos también de toda la cadena de suministros de las ciudades que dependen del turismo. Ahora esa población no tiene trabajo”, expuso.

Esta cadena de suministro se activó en navidad cuando se llegó al 80% de ocupación hotelera, sin embargo, volvió a cero con las nuevas medidas.

Ahora los hoteles tienen decenas de pedidos de devolución de dinero por las reservas hechas antes de las nuevas restricciones.

“El sector de turismo de playa necesita predictibilidad porque se aplican ventas programadas. Para el 18 de enero se tenían reservas hechas, pero con las medidas están pidiendo la devolución del dinero. Ni siquiera piden reprogramación, porque ya no confían. Los hoteles y restaurantes que almacenaron productos y contrataron personal para la temporada, ahora tienen pérdidas”, expresó.

Piden apertura

De otro lado, el presidente del Patronato Turístico de Talara, Leyter Arízaga, informó que de la proyección inicial de llegada de 20.000 turistas, se registró una caída entre el 70% y 80%.

“Los empresarios estaban muy esperanzados con la temporada, pero ahora ni se puede ingresar a la playa. Todo está paralizado”, expuso el dirigente.

En ese sentido, Arízaga informó que los gremios han formado una mesa de trabajo para pedir soluciones al ministerio de Comercio Exterior y Turismo.

“Estamos trabajando un comité de gestión de playas del norte para luchar por este destino turístico. Todas las decisiones la toman en Lima y nos ven igual como otras ciudades de la costa. Acá mucha gente depende del turismo. Hemos cumplido con todos los protocolos. Queremos ser escuchados para también rescatar la temporada de avistamiento de ballenas”, afirmó.

Alcaldes piden la apertura de playas

El alcalde de Los Órganos propuso una apertura controlada de las playas para no seguir perjudicando al sector turismo.

“Estamos preocupados porque esto afecta mucho a los comerciantes y empresarios. Estamos de acuerdo en que se amplíe el aforo de las playas, pero siempre cumpliendo los protocolos”, dijo el alcalde de Los Órganos, Manuel Quevedo. Esto va en línea a lo dicho por el alcalde de Máncora, José Ramírez.

En declaraciones anteriores, la autoridad municipal se mostró en contra del cierre del balneario por el grave impacto que traerá a la economía local.

“Tampoco se trata de decir cierro Máncora y ¿de dónde vamos a comer?, ¿de donde van a comer las familias? Necesitamos trabajar”, expuso en un vídeo en redes sociales.

Por Frank García Guerrero