Especialista en salud pública opina que en los centros de salud se está dando prioridad a quienes tengan más posibilidades de sobrevivir.
Desde el 16 de marzo -que se decretó el estado de emergencia- hasta la fecha, la situación con respecto a la pandemia no ha hecho más que empeorar. Ahora que la economía está fuertemente afectada, no ha quedado más opción que flexibilizar la cuarentena, días podríamos enfrentar un masivo aumento de los contagios.
“Eso de la meseta es artificial. Hay que esperar que vengan más casos debido a que se han flexibilizado las medidas y hay mayor posibilidad de transmisión. En 7 díasn las personas empezarán a hacer síntomas y en 14 harán síntomas graves. El sistema de salud no responde en la misma magnitud de los casos y vamos hacia un probable colapso”, estimó el epidemiólogo Edward Mezones-Holguín.
Aunque recordó que la deficiencia en la obtención de datos reales de la pande mia dificulta elaborar estimaciones certeras. “No hay datos reales. Solo tenemos modelos con limitaciones y eso impide hacer buenas estimaciones. Hay gran cantidad de subregistros. Y los tamizajes aislados tampoco son de gran ayuda”, comentó.
FALLAS DEL COMANDO
Está claro que el Comando COVID-19 regional no ha dado la talla. Para el representante del Colegio Médico, Christian Requena, esto se debería a que este equipo de trabajo presentó deficiencias desde su creación.
“No se tuvo una idea clara de quiénes conformaban las comisiones. Se necesitaron cinco resoluciones para conformar el comando y hubo muchos errores administrativos. Nació mal”, dijo.
Asimismo, criticó que el Comando no tuviera una visión clara, ni un plan concreto, ni se reuniera con frecuencia para coordinar acciones; por lo cual no se estarían escuchando opiniones externas a las de la Dirección de Salud.
“El plan de reforzamiento del sistema de salud fue tardío, y los planes de preparación y respuesta fueron incipientes. No estamos trabajando en equipo, que permita tener una mirada multidisciplinaria y, más aún, el consejo regional de salud no ha tenido participación”, explicó.
Por su parte, el especialista en salud pública, Víctor Ocaña, opinó que los hospitales ya están atendiendo en situación de guerra, es decir, están atendiendo a los contagiados que tienen más oportunidades de sobrevivir, pues no hay capacidad para atender a todos:
“Hay que optimizar recursos para salvar a los que puedan salvarse. Así es cuando se está en guerra”