El Covid-19 ha puesto de cabeza al mundo y de rodillas a la economía de muchos países, entre ellos al Perú.
El virus, sin embargo, no es tan letal como lo pintan, pues el 97% de los infectados se recupera, mientras el 3% la pasa mal porque están en un grupos de riesgo, como edad avanzada o con enfermedades crónicas, pero con tratamiento puede librarse del mal. Lo peligroso de este virus, sin embargo, es su poder de transmisión.
Cada portador puede infectar entre 7 a 14 personas, desatando un contagio exponencial que pondría en apuros a los grupos de riesgo, he allí el peligro de participar en actividades públicas o de gran concentración de personas.
Lo que se intenta con las medidas dictadas por el gobierno, entre ellas restringir las reuniones masivas, es precisamente cortar la cadena de contagio y esto no se logrará si es que los piuranos siguen en las calles, en las fiestas o en los centros comerciales donde podrían ser potencialmente infectados.
Es mejor quedarse en casa y estar a salvo, en vez de alentar el avance de la pandemia. Por lo menos en Piura no se ha presentado ningún caso hasta ahora, y así debería quedarse si todos colaboramos.