Ante la aparición de cuencas ciegas con cada lluvia, una solución viable, económica y definitiva son los tanques subterráneos más conocidos como “tanques de tormenta” “grandes tanques” o “enormes pozos”, los mismos que permiten almacenar y evacuar el agua pluvial.
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Así lo propone el presidente de la Asociación Peruana de Túneles y Obras Subterráneas (APTOS), Juan Carlos Rivera Baca: “Los tanques de tormenta son más económicos que elaborar un sistema pluvial. Es una estructura que complementa o compensa el sistema de drenaje”, expresó el especialista.
Sobre el costo, indicó que un “tanque de tormentas”, de 50 mil metro cúbicos con una profundidad de 25 metros, costaría entre 8 y 9 millones de dólares.
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Explicó que para construirlos se debe identificar las cuencas ciegas y puntos de depresión en la ciudad, instalándose en intersecciones, avenidas y plazas bajo el suelo, a través de muros de concreto de 30 a 40 metros.
Asimismo, el presidente de APTOS indicó que los “enormes pozos” tienen una prolongada duración, y el mantenimiento y la limpieza se realizan después de cada evento climatológico.
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Del mismo modo, informó que el agua almacenada se puede reutilizar, para regadíos, regresarla río o tratarla para ingresar al sistema de agua de las ciudades.
El ingeniero explicó que los “tanques de tormentas” se han construido exitosamente en otros países. “El suelo de Piura tiene arena, arcilla y mucha agua, pero no hay problema, porque estas técnicas de construcción se han ejecutado en México, país con similares características a las de suelo piurano. No hay impedimento para construir con napa freática alta”, agregó Rivera.
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Tras considerar que si bien el alcantarillado es responsabilidad de las empresas prestadoras de servicios y el drenaje pluvial está a cargo de las municipalidades, a su criterio a ambas entidades deben complementarse y trabajar de manera coordinada, pues la falta de drenaje pluvial ocasiona el colapso de desagües.
Por estas razones, Rivera recomendó a las autoridades municipales aprovechar los fondos del Gobierno para la emergencia para la construcción de este tipo de reservorios; o emplear el mecanismo de obras por impuestos.