La ciudad soportó ayer una persistente lluvia de 33.7 milímetros, que se inició en la madrugada y luego de algunos intervalos se intensificó por más de tres horas, poniendo en aprietos a las familias para llevar a los hijos e hijas al colegio o para ir al trabajo.
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Lo primero que se observó fueron calles y avenidas llenas de agua que, al no haber un sistema de drenaje, dificultó el tránsito de vehículos cuyos conductores tenian que buscar vías alternas para evitar las lagunas, huecos y cuencas ciegas.
Por otro lado, algunos transportistas quisieron hacer su agosto cobrando hasta el doble de la tarifa delservicio de taxi, aprovechando la necesidad de la gente que pugnaba por trasladarse a su centro de labores o a los centros educativos y universidades. Esta vez, los escolares de la Institución Educativa Manuel Scorza, tuvieron que cruzar una laguna formada en los exteriores de la institución para poder volver a sus viviendas ya que la intensa lluvia no cesaba.
Autoridades del sector Educación informaron que no se ha registrado inundaciones en el interior de los centros educativos, por lo que no se suspenderán las clases, salvo aquellos colegios que tengan deficiencias. El COER advirió que desde hoy hasta el domingo se presentarán en la costa y sierra de Piura lluvias de moderada a gran intensidad con valores de 30 mm.