El especialista en estadística, Roberth Sánchez, reportó que el lunes 29 de marzo se registró la cifra más alta de muertes por COVID, con un total de 42 decesos en la región.
Una cifra que se asemeja a los registros de la primera semana del mes de mayo, el más terrible en mortalidad de la primera ola, con más de 2 mil muertes en un solo mes, cuando el promedio normal era entre 400 a 500 por diversas enfermedades.
“Los 42 muertos a causa de la COVID-19 en la región solo se comparan con los registros de la primera semana de mayor del 2020. Hay que tener en cuenta que el 18 de mayo se tuvo el pico más alto con 69 fallecidos en un solo día”, refiere Sánchez.
En tanto, en los nosocomios se adicionan más camas ante cualquier contingencia. Según el jefe de UCI del Cayetano Heredia, en los módulos del hospital sumarán ocho camas más, mientras en el Jorge Reátegui, se equiparán 20 camas más.
En el hospital Santa Rosa, la proyección se ampliará con 24 camas más. El director del hospital, Edwin Chinguel, informó que en mayo se pondrá en operación 7 camas más de UCI, pero con el mismo personal que atiende las 17 camas de cuidados críticos.
