El retorno a clases presenciales para el próximo año se complica por diversos factores sanitarios, falta de adecuación y presupuesto.
Si bien para los expertos y psicólogos es urgente el regreso para no seguir dañando el aprendizaje de los niños y sus habilidades sociales, otros especialistas advierten varios obstáculos.
En el tema de adecuación, la Defensoría del Pueblo advierte que menos del 1% de colegios cumple las condiciones.
De las 6.895 instituciones educativas de Piura, solo cuatro (0,1%) cumplen con los tres requisitos para el retorno seguro. Los requisitos consisten en la información epidemiológica de la comunidad y condiciones de bioseguridad como el uso de mascarillas, acceso a agua, desinfectante y aulas con aforo permitido.
El tercer elemento son las condiciones sociales, que es la conformidad de la comunidad educativa.
Según el reporte del Sistema de Seguimiento y Alerta para el retorno seguro (Sares) que recoge Defensoría, unas 5.606 instituciones cumplen el primer requisito.
Sin embargo, solo cuatro colegios cumplen a cabalidad las tres condiciones para un retorno seguro.
“El sector educativo debe asegurar la vigencia de los derechos fundamentales a la educación, salud y a un desarrollo adecuado de más de medio millón de estudiantes peruanos”, declaró César Orrego, representant de Defensoría.
Sanitario
Sobre el tema sanitario, los médicos coinciden en que los menores pueden convertirse en vehículos de contagio.
Para el especialista en salud pública, Julio Barrena, lo ideal sería que los mayores de 12 años regresen cuando estén vacunados.
“La comunidad educativa tiene que estar vacunada como personal docente, administrativo, padres y alumnos. Otro asunto es que se debe tener un traslado seguro de los docentes que viajan a otras provincias”, indicó Barrena.
Sobre los niños más pequeños, agregó, sería complicado por el nivel de acatamiento de las medidas de bioseguridad como el uso de la mascarilla y distancia.
“Los niños pequeños son super sociales y además no sería una población vacunada”, dijo.
Según el médico y especialista en epidemiología, Edward Mezones-Holguín, recién se aprobó un estudio para vacunar a niños entre tres a 12 años de edad con Sinopharm.
“Ha salido un estudio de que la vacuna es segura en este grupo, pero todavía falta ver la fase tres”, comentó el especialista.