El dirigente ronderil, que fue encontrado sin vida cerca de una quebrada en Carmen de la Frontera, Huancabamba, habría sido torturado por sus asesinos, siendo arrojado en un paraje solitario para despistar a la Policía.
Gilmar Manchay Palacios (38), presidente de las rondas campesinas del caserío Rosarios Altos, estaba desaparecido desde el pasado 31 de mayo. El último miércoles, un agricultor halló el cuerpo del dirigente y de inmediato dio aviso a las autoridades.