Las lluvias intensas no cesarán en la región durante esta semana, lo cual enciende las alertas sobre un aumento preocupante del caudal del río Piura.
Según el jefe del Senamhi de Piura, Jorge Carranza, de continuar la tendencia se puede llegar a niveles de alerta amarilla o naranja, los cuales varían entre los 900 y 1.100 m³/seg en el puente Sánchez Cerro.
Dejó en claro que después de estos dos días de lluvias, aún no hay una situación de peligro.
“Con todo este volumen de agua [generado en las lluvias] estará llegando a Piura alrededor de 170 a 200 m³/seg, estando por debajo del umbral rojo de 1.900 m³/seg. Pero si esto persiste, con estas lluvias torrenciales es muy posible que estemos llegando al umbral amarillo o naranja”, destacó el especialista.
Seguirán
De otro lado, Carranza señaló que existe entre 70 y 80% de probabilidad que se mantengan las lluvias torrenciales de nivel 4 en las zonas anteriores.
Se trata de Malacasí, Santo Domingo, Lancones, Ciruelo, entre otras.
Por ejemplo, en Malacasí llovió 130 milímetros en una sola noche, que es casi el 50% del valor de un mes.
“Hay una cantidad de humedad en la atmósfera tan alta que nos presenta un cielo oscuro. La humedad de trasvase se encuentra con las altas temperaturas del mar. Es como si se encontrara gas y fuego, y comienza a caer la lluvia en cantidades bíblicas. El panorama en general es de lluvias durante toda la semana”, declaró Carranza.
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Tambogrande
El mayor impacto de las lluvias se generó en Tambogrande y Chulucanas.
En esta primera zona, en la quebrada San Francisco, el caudal del agua arrasó los puentes artesanales que la población construyó para cruzar hacia la otra orilla.
Según el alcalde de Tambogrande, Segundo Meléndez, intentaron intervenir con maquinaria, pero la fuerza de la quebrada no se les permitió.
“Hemos ido con el Ejército y nuestro equipo de maquinaria, pero no se puede trabajar porque el río está muy crecido. Días atrás expandimos el río para quitarle un poco de fuerza y ver si se podía controlar con unos puentes provisionales que hicimos, pero igual lo tumbó anoche. […] la gente está pasando con cámaras corriendo mucho riesgo. Pedimos Provías y Vivienda que tomen acciones con un plan de contingencia”, declaró el alcalde.
Agregó que la principal necesidad es combustible para operar la maquinaria que deben usar en esta emergencia.
Postergar clases
De otro lado, el alcalde señaló que de continuar las lluvias, se debería suspender el inicio de clases.
“No creo que deban empezar este lunes porque los caminos están dañados y no se pueden acabar los mantenimientos de los centros educativos. Debe primar la sensatez y aplazar una o dos semanas más”, apuntó.
Quebradas
De otro lado, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) reportó que ayer hasta las 8:00 am, se contabilizó 60 quebradas activas en toda la región.
Debido a este y otros motivos como deslizamientos, unos 19 caseríos quedaron aislados. Estos se ubican en los distritos de Pacaipampa, Lagunas, Huarmaca, Yamango (ocho), Montero y Lancones.
De otro lado, el COER reportó que entre el 6 y 7 de marzo se registraron un total de 1.961 viviendas afectadas, 75 damnificadas y 44 instituciones educativas dañadas por las lluvias.
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Policías
De otro lado, en la región se registraron acciones de destacar, como lo hecho por los policías de la comisaría rural de Talandracas (Chulucanas).
Los agentes trasladaron sobre sus hombros a un promedio de 50 pobladores que tenían la urgente necesidad de cruzar.
Asimismo, los familiares y pobladores de una mujer gestante de 37 semanas, tuvieron que arriesgar su vida y cruzar con ella la quebrada San Francisco, para que asista al hospital de Sullana para una cesárea.
Una ambulancia del centro de salud I-4 de Tambogrande la esperó en la orilla y la llevó al nosocomio.
Cuencas
En el lado urbano, la precipitación activó la mayoría de las cuencas ciegas de la ciudad.
Los puntos más críticos fueron la zona de los dos grifos (cruce de las avenidas José Aguilar y Raúl Mata de la Cruz) y las cinco esquinas cerca al asentamiento humano Las Dalias.
Al respecto, el alcalde de Piura, Gabriel Madrid, informó que se destinaron tres cisternas y motobombas en coordinación con el Gobierno Regional, para evacuar las aguas.
“Imaginemos una lluvia de 100 milímetros y la ciudad se inunda. Esperamos que esto haga reflexionar a la Autoridad para la Reconstrucción para que se tomen acciones inmediatas sobre la propuesta de la Municipalidad de Piura, para la exoneración de la preinversión y pasar rápido a la inversión. Esto acortaría los plazos para tener la solución definitiva del drenaje pluvial. De otro lado, siempre vamos a tener este fantasma de la inundación”, sostuvo el alcalde.
En la zona de los dos grifos varios conductores debieron bajarse para empujar sus unidades y cruzar entre las aguas.
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