El 4 de mayo cuando se reactivaron algunas actividades económicas, entre ellas el funcionamiento de restaurantes a través del servicio de delivery, sus descartables o residuos de un sólo uso también se han convertido en un problema de contaminación y mal manejo para su disposición final.
Según el estudio de caracterización realizado en julio del 2019, en Piura distrito, una familia genera diariamente 0.53 kilogramos de residuos domiciliarios de los cuales 57.51 % orgánicos y 42.49% inorgánicos. Estas cifras podrían haber variado al estar ahora las personas más tiempo en sus casas, al tipo de actividades que realizan y por la crisis de salud pública, que obviamente ha incrementado la generación de residuos peligrosos como guantes, mascarillas, medicamentos, etc.
“Recién en junio empezó a descender la producción de residuos sólidos, que sigue siendo alta, pero menor con respecto a los primeros meses de la pandemia donde la producción de residuos se incrementó considerablemente y el problema más que la producción, sigue siendo su mal manejo o disposición final”, expresó el jefe de la Sub Unidad de Tratamiento y Disposición Final de la Unidad de Residuos Sólidos de la Municipalidad de Piura, Pedro Farfán Juárez.
Según Farfán Juárez, es usual recoger la “bolsa verde”, donde sólo debe ir desechos reciclables, desechos como servilletas, envases de tecnopor o bolsas, “eso para nosotros no es valorizable, eso se desecha, eso ya es basura que tiene que ir de frente a la compactadora. Sin embargo, aún falta mucho por trabajar en la parte educativa para acercarnos a la población y que sepan que sí es posible segregar correctamente, para contribuir con el medio ambiente, para que nuestro personal realice un trabajo seguro, para poder generar un ingreso para los recicladores y para que dar más vida útil a nuestro botadero”.
Sin embargo, el funcionario reconoce que por la pandemia es muy difícil seguir sensibilizando y diciéndole a la población qué reciclar y qué no.
Segregar es posible
El funcionario explicó que en Piura hay 13 800 familias sensibilizadas que participan del Programa de Segregación en la Fuente y Recolección Selectiva de Residuos Sólidos “Piura Recicla”.
“El trabajo más difícil es sensibilizar y educar a las familias, pero en Piura ya venimos trabajando en eso, el año pasado tuvimos 23 000 familias participando de “Piura Recicla”, este año por la pandemia se está trabajando con un grupo menor, pero se ha mantenido el programa porque tenemos que seguir trabajando en educación ambiental”, señaló.
El año pasado a través del Programa de Incentivos a la Mejora de la Gestión Municipal se cumplió con reportar una valorización 1230 toneladas de residuos inorgánicos. Esto como parte de las iniciativas propuestas a los gobiernos locales por el Ministerio del Ambiente (MINAM). Para este año, por la pandemia, la meta propuesta a los gobiernos locales es menor, Piura deberá valorizar 345.14 toneladas.
La limpieza y el COVID-19
En el 2019 la Municipalidad Provincial de Piura aprobó la ordenanza municipal N°278-00-CMPP que Regula la Gestión Integral de Residuos Sólidos en Piura; y a través de la cual se establecen multas que podrían llegar hasta una UIT para las personas, instituciones o comercios que hagan mal uso de sus residuos sólidos generados.
La jefa de la Unidad de Residuos Sólidos de la Municipalidad Provincial de Piura, Ing. Ruth Oliva Peña, señaló que como la Ordenanza se aprobó casi terminando el año (14 de octubre) y se tenía programado hacer campañas agresivas para implementar su aplicación, este año con la pandemia, se complicó la difusión, sensibilización y fiscalización para el cumplimiento de esta norma.
“Con el COVID-19 surgió una preocupación grande porque veíamos las mascarillas, los guantes y hasta colchones, que podría tratarse de pacientes con el virus, tirados en las calles. Las personas no estaban haciendo una buena disposición de sus residuos peligrosos y exponían a mi personal al contagio. Teníamos una ordenanza recién aprobada, es cierto, pero por la situación difícil hacerla cumplir, y además, el problema era la indiferencia con el personal obrero y la falta de educación”, expresó.
Recordó que en los primeros dos meses de la pandemia 55 trabajadores se contagiaron de coronavirus lo cual ponía en riesgo cada día más la recolección de residuos en Piura.
“Había un riesgo grande y también mucha indiferencia de la población para con este grupo de trabajadores que por la edad (ser mayores de 60 años), por tener diabetes, hipertensión o alguna otra enfermedad lo tuvimos que mandar a casa y cada vez eran menos gente en la calle haciendo el trabajo”, precisó.
La funcionaria señaló que a seis meses de emergencia sanitaria por COVID – 19 aún hay un buen grupo de trabajadores que no se ha reincorporado a sus labores.
“Tenemos un problema grave de recursos, como casi todas las instituciones públicas, y también de recurso humano lo tenemos reducido en un 50%. Es por eso que corresponde a la población colaborar y sacar su basura cuando pasa la compactadora, reciclar y evitar ensuciar. La unidad que dirijo nunca paró sus labores, con falta de maquinaria, personal y todo hemos seguido; pero llamo a la reflexión a las personas y a que se pregunten: ¿qué habría pasado si el servicio de limpieza y recolección se dejaba de brindar?”, expresó la jefa de la Unidad de Residuos Sólidos.
Señala que los primeros dos meses, la ciudad a pesar de la falta de personal, se lograba mantener limpia, se controlaba los puntos críticos y ello debido a que existía inmovilización social, “lo que nos lleva a concluir que somos los ciudadanos los responsables de mantener limpia la ciudad”.
Sanciones
Para Oliva Peña, el COVID – 19 ha sido aleccionador y por eso se han implementado nuevas estrategias para mejorar el manejo de los residuos sólidos en la ciudad.
Refiere que a partir de octubre se empezará con los “operativos ambientales”, para lo cual se ha coordinado con Fiscalización para que a través de las cámaras de video vigilancia se detecte a las personas cuando están tirando basura en la vía pública y poder multarlos inmediatamente dando cumplimiento a la ordenanza N°278.
Asimismo, indica se ha planteado el uso del aplicativo VIPA para sancionar a las personas que arrojan basura a la vía pública, tal como se usa ahora para sancionar a los conductores que cometen infracciones tan solo con un video que reportan los ciudadanos.
“Se viene trabajando en alianza estratégica con las JUVECOS la valorización de los residuos orgánicos e inorgánicos. Con los operativos descentralizados de limpieza pretendemos recuperar la confianza en la población, pero expresando nuestras debilidades que es la falta de personal”, señaló la funcionaria.