El avance acelerado de los contagios de COVID-19 obligaron al Ejecutivo a declarar a las provincias de Piura, Sullana y Talara en un nivel sanitario de riesgo alto.
Según el Colegio Médico, que recoge las estadísticas del Ministerio de Salud, los casos positivos en Piura casi se han duplicado en solo una semana.
En la semana 51 (tercera semana de diciembre) se reportaron 536 casos, pero en la semana 52 (del 25 de diciembre a la fecha), la cifra se disparó a 1.001. Para la Dirección Regional de Salud, el incremento solo sería del 25%.
A nivel nacional, las cifras pasaron de 11 mil casos en la semana 51 a más de 14 mil 680 en la semana 52. Además de Piura, en Lima los casos también se duplicaron en los últimos días.
Restricciones
De acuerdo a los decretos vigentes, el nivel de riesgo alto implica una reducción de los aforos permitidos en supermercados, centros comerciales, restaurantes, entre otros.
En relación con el horario de la inmovilización social, este se mantiene entre las 11:00 pm y las 4:00 am.
En declaraciones a un medio nacional, el exministro y economista, Jorge González Izquierdo, indicó que las restricciones tendrán un efecto moderado en la economía. El impacto directo, afirma, ocurre con el aparato productivo, ya que se obliga a producir menos al reducirse el horario de atención y aforos permitidos.
El impacto indirecto, continua, es la restricción en la demanda del sector privado, porque existirá un temor en acudir a un restaurante o salir a un centro comercial.
En el mismo sentido se pronunció el representante de la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines de Piura (Ahora), Óscar Soriano.
“El sector podría verse afectado, aunque el ministro ha dicho que no cree conveniente una cuarentena, así que por ese lado estamos tranquilos. Sin embargo, la reducción de aforos y los niveles de alerta que se van incrementando igual producen un efecto negativo en la percepción de los viajeros, que podrían optar por postergar sus viajes”, aseveró Soriano.
Por su parte, el decano del Colegio Médico de Piura, Christian Requena, hizo un llamado a las autoridades para fiscalizar el aforo de los locales privados.
“De parte de las autoridades debe haber una mayor restricción en cuanto al aforo en espacios públicos y centros comerciales. Son lugares donde acuden los ciudadanos y no hay ventilación. Aún en lugares ventilados, también encontramos personas por encima del aforo correspondiente”, comentó Requena.
El especialista recordó que se trata de una responsabilidad compartida con la población que debe seguir con las medidas de protección frente a la tercera ola.
Agregó que como Colegio Médico a nivel nacional han solicitado la contratación de mayor número de personal.
“Esto es una responsabilidad compartida. Si las autoridades políticas, sanitarias y los ciudadanos no actuamos en conjunto frente al COVID, habrá un desborde de casos”, señaló el galeno.
Pruebas
Cabe indicar que esta semana se reinició la vacunación con una gran aceptación de la población. En un recorrido por el centro de la ciudad, centro de salud de Pachitea y posta del mercado se observó una gran afluencia de piuranos para recibir la primera, segunda o tercera dosis.
Al respecto, el director regional de Salud, José Nizama Elías, explicó que esta es la mejor forma de prepararse ante la tercera ola.
“El pedido de más camas UCI dependerá de cómo se vaya desarrollando esta epidemia”, agregó.
Más equipos
Por su parte, el director de Inteligencia Sanitaria de la Dirección de Salud, Eddy Leyva informó que han solicitado duplicar la cifra de Equipos de Respuesta Rápida (ERR) para enfrentar la tercera ola en la región. Ahora tienen en campo a unos 190 equipos.
Asimismo, el funcionario informó que sí tienen stock suficiente de pruebas de antígeno y molecular para atender a la población.
“La región está abastecida. A inicio de diciembre llegaron 15.000 pruebas moleculares y a fines del mes, llegaron 10.000 más. Además el INS tiene la oferta de entregarnos las necesarias. Además, tenemos 50.000 pruebas de antígeno”, anotó.
Leyva detalló que en la última semana se ha notado un incremento entre el 40% y 50% de la demanda de pruebas para descartar el COVID.
“Hay un aumento notorio en la mayoría de puestos de control COVID y centros de salud de Santa Julia, San Pedro, Consuelo de Velasco, Cesamica que atienden las 24 horas. Antes se hacían 10 a 15, y ahora se hacen 25 en promedio en cada punto”, informó.
En relación a la variante ómicron, Leyva detalló que siguen con los cinco casos confirmados en diciembre.
“El 2 de enero se determinó la presencia de la variante ómicron en el distrito Veintiséis de Octubre. Son cinco casos confirmados por secuenciación genómica”, afirmó Leyva.