Los vecinos de la calle Zarumilla, en el barrio Pachitea, están mortificados pues esta calle, aparte de haberse convertido en un estacionamiento improvisado de mototaxis y otros vehículos, ahora se quedaría sin una tranquera que, aseguran, los protege de robos por las noches.
Los moradores comentan que desde que se inició la pandemia de la COVID-19 en nuestro país, ellos colocaron cintas y acordonaron la zona pues había mucho tránsito de personas. “Lo hicimos porque la gente pasaba para el mercado y había muchos contagios”, comentan.
Sin embargo, la cintas eran cortadas, por lo que procedieron a colocar dos tranqueras: “Ahora, un vecino, no sabemos con qué argumentos, llamó a la Municipalidad para que retire una de las tranqueras. Esto nos perjudica porque ahora la calles es usada como cochera por sujetos de mal vivir quienes cobran por cada mototaxi o vehículo que se estaciona y no podemos ni salir de nuestras casas con nuestros vehículos. Todo se vuelve un caos cuando se descarga verdura y abarrotes en el mercado”.
Los vecinos añaden que detrás del retiro de la tranquera está un vecino que vende licor a altas horas de la noche. “Hay inseguridad en las noches. Varios vecinos hemos sido víctimas de robo en nuestros vehículos y por ello exhortamos a las autoridades que no retiren la tranquera”, dijeron.
Cabe señalar que las tranqueras también son consideradas un impedimento al libre tránsito.
Dato
* Los vecinos señalan que en esta calle también se han instalado bares y ya ha habido varios enfrentamientos y peleas que han dejado heridos. Por ello piden a las autoridades que se acerquen para que controlen la zona.