La excanciller, Elizabeth Astete asegura que el presidente Francisco Sagasti le dio permiso para vacunarse por adelantado. La titular de la PCM, Violeta Bermúdez enfatiza que el Ejecutivo no estaba enterado.
En Palacio de Gobierno crece la polémica en cuanto al caso “Vacunagate”. La premier Violeta Bermúdez y la exministra de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, se han visto enfrentadas por el caso de corrupción de las vacunas contra el coronavirus y que involucra al presidente de la República, Francisco Sagasti. ¿Quién dirá la verdad?
Durante su presentación ante la subcomisión de Acusaciones Constitucionales, la excanciller Elizabeth Astete aseguró que, en su carta de renuncia a la Cancillería, evitó mencionar que para recibir la primera dosis de la vacuna de Sinopharm contra la COVID-19 recibió la “anuencia” del presidente Francisco Sagasti. Esto debido a que no quería afectar la imagen del Gobierno.
“Yo había tenido una reunión el 11 de febrero con la presidenta del Consejo de Ministros, que me convocó a su despacho, en la que me preguntó, de entrada, si es que yo le había avisado al presidente Sagasti antes o después de mi vacunación. Le dije de manera enfática que yo le había avisado al presidente antes de mi vacunación. La primera ministra me sugirió no involucrar al presidente y yo le contesté que no era mi intención hacerle daño, ni al presidente de la República, ni al gobierno actual”, relató.
Sin embargo, la ministra Bermúdez, negó todo y fue enfática al remarcar que se enteraron de la vacunación de Astete, tras su renuncia.
“Niego la afirmación de la exministra Astete. No nos informó de su vacunación irregular, de la que nos enteramos el 14 de febrero cuando nos presentó su renuncia. Nunca le sugerí que guardase reserva de nada, por el contrario, al enterarnos le aceptamos inmediatamente su renuncia”, respondió.
En esa misma línea, el ministro de Salud, Óscar Ugarte, indicó que las vacunaciones irregulares “Han sido decisiones individuales sin el aval del Presidente”.
Mea culpa
Durante su presentación ante la comisión, la excanciller pidió perdón por haber recibido la primera dosis de la vacuna de Sinopharm; sin embargo, rechazó que esto se haya dado a cambio de un beneficio al laboratorio chino.
“Aunque acudí a vacunarme con el convencimiento de que se trataba de un procedimiento regular, en un acto público, a plena luz del día, y con la anuencia del presidente Sagasti, soy consciente del error que cometí y de sus consecuencias negativas a nivel personal e institucional”, declaró.
Datos
* Elizabeth Astete negó que con sus afirmaciones busque crear inestabilidad política “en momentos difíciles” para el país ni afectar al Gobierno de transición y emergencia.
* La exministra Pilar Mazzetti dijo que su inoculación fue una decisión estrictamente personal.