Los electores ya no confían en los partidos políticos de alcance nacional. Así quedó demostrado una vez más en estas Elecciones Regionales y Municipales 2022.
Según el último reporte de la ONPE, los movimientos independientes se consolidaron en 16 regiones y los partidos políticos en 9. Alianza para el Progreso (APP) solo consiguió el primer lugar en Tumbes, Lambayeque y La Libertad. Mientras que Somos Perú (SP)en Cajamarca, Cusco, Loreto y San Martín. De igual forma, Avanza País en Madre de Dios y Frente de la Esperanza en Apurímac.
Para los analistas consultados, los resultados de estos comicios evidencian la pérdida de prestigio de los partidos políticos y la desconfianza permanente de los ciudadanos en la clase política tradicional.
“Los partidos se han desprestigiado de una manera muy significativa, Acción Popular ha desparecido al igual que Fuerza Popular, el país se está polarizando por el colapso de los partidos de alcance nacional”, sostuvo el exgobernador de Ica, Fernando Cillóniz.
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A su criterio, la corrupción que albergan las organizaciones nacionales empezando por sus líderes han hecho que año tras año pierdan respaldo ciudadano. “En estas circunstancias, la gente busca cualquier opción y esto no es bueno porque muchas regiones están cayendo en la trampa de los caudillos locales”, comentó.
Rechazo
Por su parte el analista político, César Campos, señaló que además de la crisis dentro de los partidos existe un evidente rechazo por parte de la población. “Hay una desconfianza permanente hacia los partidos políticos llamados tradicionales, que abona en la crisis del sistema político peruano”, dijo.
Asimismo, subrayó que la mayoría de los peruanos se han alejado de la esfera política y ya no se ven verdaderas militancias como años atrás. “Al haber un desanclaje, los ciudadanos abrazan su propia independencia y creen que votar por un partido significa respaldar a todos los dirigentes así no sean de su propia localidad”, añadió.
Sin embargo, Campos manifestó que optar por un movimiento regional tampoco es garantía de una mejor elección y menos de una buena gestión. “Desde mi punto de vista tampoco garantizan un buen desempeño en la gestión, ya se ha visto una gran cantidad de gobernadores regionales provenientes de movimientos locales que están en problemas y esto porque no responden a un estructura organizada sino básicamente improvisada”, explicó.
Finalmente, señaló que los partidos políticos deben pasar por una renovación importante en sus cuadros y buscar el respaldo de las unidades de base como las Juvecos y demás asociaciones civiles para volver a tener la relevancia de antes.
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