La congresista Rosío Torres (Alianza para el Progreso), fue denunciada por recortar los sueldos de sus trabajadores, uniéndose a la lista de los «mocha sueldo». La parlamentaria «borra chat» ha negado varias veces esta versión en el Congreso de la República, pero su extrabajadora la desmiente. 

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Nathaly Rubio Yllatopa, extrabajadora de la congresista Rosio Torres confirmó que la legisladora de Alianza para el Progreso (APP) fue quien pidió que transfiriera dinero de su sueldo a la cuenta de su sobrino David Pérez Guerra. De esta manera desmiente la declaración que Pérez dio ante la Comisión de Ética la semana pasada afirmando que pidió parte de las remuneraciones por su propia decisión.

“Yo sé que después de esto vienen muchas cosas para mí y solamente pido que se haga justicia porque todavía quedan personas correctas como yo y mi familia. Pido al Congreso de la República las garantías para mi persona y para los trabajadores que están denunciando”, señaló Rubio en el programa Punto Final.

Ella trabajó hasta la semana pasada como auxiliar del despacho de la congresista Torres, pero renunció cansada de sus presiones. Su testimonio es clave para confirmar el ilegal pedido de dinero de la parlamentaria.

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Rosío Torres lo niega ante la Comisión de Ética

La legisladora habría declarado ante la Comisión de Ética que ningún trabajador denunció que recortaba el sueldo. Esto debido a que hasta ese momento no se tenían ningún testimonio de manera pública, pero sí había documentos que comprobarían lo que estaría sucediendo.

Antes este grupo de trabajo presidido por Karol Paredes, la parlamentaria presentó hasta ocho Declaraciones Juradas de diferentes notarías. En el documento de Rubio se indicaba que el depósito se realizó por “la devolución de préstamos”.

Sin embargo, denuncia que este oficio fue firmado por obligación de la parlamentaria. Y no se trató de ningún préstamo, sino de un pago por el puesto de trabajo.