Quienes hacían cálculos mentales en cómo gastar su fondo de pensiones se quedaron con las ganas. El gobierno de Martín Vizcarra les mató la ilusión.
Por ahora solo desocupados que en los últimos 12 meses no han aportado a las AFP pueden retirar hasta S/2 mil.
El resto debe seguir su lucha contra las AFP por tiempo indefinido, salvo que el Congreso los salve.
Es cierto, hoy las pérdidas de las AFP son millonarias, y estas se las cargan a los aportantes quienes miran con desesperación cómo, en vez de subir, se reduce en miles de soles su fondo pensionario.
La situación es crítica por la paralización de la economía nacional y mundial, sin embargo, pese a ello, los economistas recomienda no abrir las bóvedas de las AFP.
La razón técnica es que los trabajadores en empresas formales solo representan el 30% de la PEA y no están dentro del grupo vulnerable.
La medida, además del matiz populista que engloba, pondría en riesgo el fondo pensionario a futuro, pues de acuerdo al panorama económico mundial, no es un buen momento para gastarlo irresponsablemente.
Más de uno seguirá renegando hoy, pero es mejor a condenarse a ser candidato de la esmirriada pensión 65.