Los peruanos no solo deben de lidiar y cuidarse de los asaltos a mano armada en la calle, la casa o en los restaurantes, sino también de las estafas digitales.
No por descuido propio sino porque instituciones estatales a cargo de administrar y preservar –bajo el carácter de confidencialidad-, ha dejado abierto la data personal de miles de ciudadanos que hoy están a merced de los piratas, estafadores y ladrones cibernéticos como los zorrito Run Run.
La data, según Asbanc, la venden los “zorritos” a cualquiera que pague hasta 170 soles vía Telegram o WhatsApp. El problema es que esta información estaría siendo usada por delincuentes para hacer compras online, vaciar cuentas a través de transferencias bancarias y hasta préstamos bancarios, ya que la data cuenta con la ficha de Reniec; teléfonos y datos del trabajo de la víctima, incluso la huella dactilar.
La vulnerabilidad cibernética es tal que los delincuentes tienen acceso a información más personal como datos familiares, cuentas de AFP, Cts, cuentas bancarias y hasta el email personal. El problema es la poca cultura cibernética de las instituciones y el grave descuido de quienes manejan esta data.
Síguenos en nuestras redes sociales:
- Facebook: Diario El Tiempo
- Twitter: @eltiempopiura
- Instagram: @eltiempopiura
- YouTube: Diario El Tiempo
- TikTok: @eltiempopiura