La lucha contra la violencia física y psicológica en las instituciones educativas sigue siendo letra muerta en la región, lo que explica por qué Piura continúa liderando las cifras de un problema que crece silenciosamente, sin que se le dé la importancia debida por parte de las autoridades del sector educación y otras instituciones competentes.
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De setiembre 2013 a octubre 2022, la plataforma virtual ‘Sí se ve’ del Ministerio de Educación registró 3.369 casos de bullying, violencia física, psicológica y sexual en los colegios de Piura, convirtiéndose en la segunda región con más casos del país. Llama la atención, sin embargo, que en lo que va de este año, la Dirección Regional solo ha registrado 287 casos a pesar que hay visibles falencias en la tarea de prevenir estos graves hechos. ¿Hay cifras ocultas? ¿Cuántos escolares no denuncian por falta de apoyo de sus maestros o tutores o porque estos simplemente no les creen, y muchas veces prefieren el silencio para no poner en riesgo el “prestigio del colegio”?
No solo eso. El defensor del pueblo ha advertido que los siete protocolos establecidos en las leyes desde el 2018 y que tienen que ver con violencia física, sexual, psicológica, violencia del docente hacia los escolares y del personal administrativo hacia los escolares, no se están cumpliendo o no se verifica que se apliquen. Los responsables de los centros educativos no lo hacen.
A una semana del horrendo crimen de un escolar a manos de otros alumnos que, según los padres de familia, ya había agredido a otros de sus compañeros con la misma modalidad -atacarlos con cuchillo a la salida de clases- y no era separado del colegio, la UGEL Piura y la Dirección de Educación aún no se pronuncian sobre las investigaciones.
Es importante que, sin violar la reserva de los procesos penal y administrativo de este y otros casos, se informe a la ciudadanía con cifras reales sobre cuánto ha crecido la violencia en los colegios de la región y cuáles son las estrategias que se está aplicando para prevenirla y erradicarla.
No se debe perder de vista que, por ejemplo, en el caso del acoso o agresión sexual, lo que favorece la impunidad es justamente el silencio, las víctimas son amenazadas para callar. De allí que la titular de educación haya anunciado que el Ministerio de Educación publicará la relación de maestros sentenciados por violación. ¿Cuántos hay en Piura?