Las siglas PDU y PAT son del Plan de Desarrollo Urbano y Plan de Acondicionamiento Territorial. Son instrumentos de planificación y gestión para la decisión política y gerencial de los gobiernos locales.
Para ello el Ministerio de Vivienda ha encargado a consultoras que preparen aquellos, bajo los alcances de la reconstrucción con cambios, comprendiendo a las regiones de Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad, Ancash, Lima Metropolitana e Ica. Con tal fin, el Ministerio de Vivienda, convocó a licitación para hacer estos PDU y PAT desde 2018, desembolsando S/ 30’043,353 a tres consultoras.
Una de ellas Ayesa Ingeniería y Arquitectura, ha ganado 3 licitaciones; lo que hace para esta sola consultora un total de s/17’595,628 soles (59% del monto licitado). Lo cierto, que esos PDU y PAT, ya se han hecho y lo que la consultora busca, es que le validen sus planes, para que en sesión del Consejo Provincial de Sullana, le den la conformidad y pueda cobrar.
El expediente no trae novedades para la planificación urbana de la ciudad de Sullana, que en palabras del arquitecto César Lama More es “una ciudad paralítica”, porque se ha frustrado su movilidad hacia el Pacífico y con el tunel de la Panamericana norte se ha convertido en ciudad interior lúgubre, con un “cúmulo de pueblos jóvenes”. El mismo Lama propone que Sullana sea una ciudad motriz, con dos ejes articulados, uno el de la Panamericana Norte y otro el dado por el trazo ferroviario Sullana-Paita, que llega hasta Bellavista.
Lamentable, esos PDU y PAT, han sido ejecutados sin participación de la sociedad civil, en torno a sus colegios profesionales y que se pretendan aprobar para hacer su cobro. Otra observación, es la ausencia del enfoque metodológico de la Agenda 21, Capítulo 40. Más bien considera la reubicación del cuartel Miguel Cortez al distrito de Miguel Checa, situación que el representante del alcalde rechazó, porque nunca habían sido consultados.
Estos planes, no están unidos a la mancomunidad de los 5 distritos de la provincia. Hay falencia para la gestión de riesgo de desastres, sobre todo para el uso del canal vía, para el mejoramiento del paisaje con el manejo de aguas-lluvia para crear alamedas inundables. Es temerario se que desperdicie presupuesto en hacer planes de gabinete, dirigidos desde el Ejecutivo, en visión cortoplacista y que sólo sirven para dar ganancia a los consultores, en actos “non sanctos”, que debe investigar Contraloría y el Ministerio Público.