La jornada democrática que termina hoy con la segunda vuelta, no es cualquier elección, no solo por el reto de unirnos como peruanos en plena segunda ola de contagios, para dar continuidad al sistema democrático; sino porque el presidente o presidenta que elijamos hoy tiene, junto con el nuevo Congreso, la enorme responsabilidad de derrotar la pandemia y sacar al país de una de las peores crisis sanitarias, económicas y políticas de que se tenga noticia.

Se trata del quinto proceso electoral consecutivo desde el retorno a la democracia en el 2001, lo que demuestra que es el sistema más apropiado para seguir impulsando nuestro desarrollo como país y dar continuidad a lo avanzado hasta ahora en materia económica, generación de empleo, salud, educación, seguridad, etc.

Es un mérito que hoy los peruanos nuevamente concretemos el anhelo que tanto esfuerzo y vidas costó a nuestros antepasados: tener elecciones libres y democráticas, pues lamentablemente durante los siglos XIX y XX la inestabilidad fue una característica del Perú y, cada cierto tiempo, la democracia fue interrumpida por golpes de Estado.

Acudamos a sufragar movidos no por miedos ni odios, sino guiados por la razón. De nosotros, de más de 24 millones de ciudadanos habilitados para ejercer nuestro deber y derecho a elegir libremente, depende que el país avance o retroceda en los próximos cinco años.

Si bien hemos sido testigos de una campaña muy controvertida cargada de enorme polarización que ha derivado en incertidumbre y expectativa por los resultados, acudamos con la seguridad de que se respetará la voluntad popular, como ya ocurrió en la primera vuelta.

No en vano el presidente Francisco Sagasti ha invocado a ambos candidatos a mantener la serenidad, esperar y respetar los resultados oficiales. La invocación va también para todos los electores, para quienes respetar la voluntad popular, independientemente de los resultados, es la mejor manera de renovar su vocación democrática en el marco del respeto al marco legal. Algo que ya es una característica de cada elección en nuestro país.