El domingo 7 de febrero se convirtió sin lugar a dudas en un día histórico para el Perú: a bordo de un avión de Air France, llegaron al país las primeras 300 mil vacunas de Sinopharm contra la COVID-19.
Arribaron en tres contenedores de carga aérea, con controles activos de temperatura de Envirotainer.
Si bien es cierto no significa el fin de esta pandemia que ha enlutado al mundo y que nos ha arrebatado a muchos seres queridos, considero que es una luz de esperanza para iniciar la lucha contra este virus letal.
Los peruanos no podemos evitar sentirnos esperanzados en este gran paso, incrédulos o no respecto a la vacuna, estuvimos atentos a las noticias.
Nuestra atención se fijó en el desembarque de los contenedores y luego en su desplazamiento hasta Talma y a los almacenes de Cenares, rodeados de un gran contingente de seguridad. Ese mismo día y el lunes nos seguimos emocionando con los aplausos y expresiones de triunfo del personal de Salud, una alegría que compartimos los ciudadanos al saber que por fin nuestros profesionales de la primera línea de combate contra el mortal virus, ahora podrán trabajar más tranquilos, para seguir salvando vidas.
Esperemos que todo el proceso de vacunación se desarrolle este año con normalidad y transparencia y que al finalizar el año todos los peruanos estemos protegidos. Nuestro compromiso es seguir cuidándonos, confiar en el esfuerzo de la ciencia y sacar de nuestra cabeza aquellas conjeturas que se han tejido de manera irresponsable sobre el objetivo de las vacunas.
Vivimos una segunda ola, no podemos descuidarnos, la vacuna si bien nos ayudará a enfrentar el virus, no nos aseguran protección total, el virus vive y vivirá con nosotros más tiempo, no podemos dejar de lado las recomendaciones sanitarias ya conocidas.
El reto es seguir combatiendo la COVD-19 sin descuidar el proceso electoral en marcha. A doscientos años de nuestra independencia, la mejor manera de celebrar nuestra libertad, es despojarnos de las cadenas de la enfermedad y de la crisis económica y social que vive nuestro Perú. Más compromiso, menos irresponsabilidad y conjeturas. A poner el hombro por nuestra Patria y por nuestra salud.